Corazón Paciente
Creo en un Dios que escucha mi oración, que me oye cuando clamo, cuando le hablo, cuando le alabo y le canto. Ese Dios que es Señor, que es Padre, ese Pastor que tiene cuidado de mí, no hay nada que Él no conozca y nada que no controle y maneje a Su perfección. Ese mismo Dios, así como oye, también habla! Porque es un Dios real, un Dios vivo, que cumple sus promesas, y su Palabra dice “ Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas.” Amós 3:7. He escuchado a alguien decir: “Quien tiene una Palabra lo tiene todo”. Tener una palabra, una promesa de Dios, es tener una esperanza, una razón, un propósito para vivir, para avanzar, para estar en paz y confiado. Pero sucede que solemos ser impacientes, queriendo adelantar el tiempo de Dios, desesper...